Nada tiene realidad fuera de lo que concierne a las operaciones de nuestro propio espíritu.
Yeno, el sexto patriarca, vio un día dos monjes que miraban la bandera de una pagoda ondular al viento. Uno dijo: "Es el viento que pone la bandera en movimiento";el otro contestó: "Es la bandera por sí misma que se mueve"; pero Yeno les explicó que el movimiento real no venía del viento ni de la bandera, sino de algo más que ellos poseían en su espíritu...
Hiakujo se pasea por una selva con uno de sus discípulos, cuando una liebre saltó delante de ellos.
¿Por qué esta liebre huye de nosotros? _ Preguntó Hiakujo.
Porque nos teme - le contestaron.
No, es porque tenemos instintos mortíferos.
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