Incluso así de tarde sucede:
la llegada del amor, la llegada de la luz.
Te despiertas y las velas se encienden,
Las estrellas congregadas, los sueños se derraman en tu almohada
y sueltan ramilletes cálidos de aire.
Incluso así de tarde los huesos del cuerpo refulgen
Y el polvo de mañana brilla convertido en aliento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.