Hay creencias que lejos de ayudarnos,perpetúan el sufrimiento,
justifican errores y son la coartada perfecta para mantenernos en el sueño,
o quizás,no sean las creencias,sino la forma en que las vivimos.
Hay quien cree en las almas gemelas,la reencarnación,el karma...
Y puede ser que esté enamorada de otra persona y por una serie de sincronicidades,fechas
de nacimiento y otros,estar convencida de que ha encontrado su alma gemela.
Sin embargo,esta situación en lugar de reportarle la mayor de las dichas,
le produce una infelicidad constante porque la relación no termina de culminar felizmente,
y en muchos casos,ni siquiera llega a ningún tipo de relación sentimental.
Pero esta persona cree en las almas gemelas y esta convencida,
a pesar de todos los pesares,que esta relación llegará tarde o temprano a buen puerto.
Pasa el tiempo y se mantiene cerrada a otras posibles relaciones
porque sigue ofuscada esperando la unión con su alma gemela.
En ningún momento se plantea la posibilidad de que quizás,
ambos hayan acordado que en esta reencarnación,
vivirían por separado para poder desarrollar cada uno por su lado
otras opciones individuales que de estar juntos,no seria posible
o vivir una serie de aprendizajes con personas distintas,
también podría suceder que uno de ellos tuviese una serie de karmas
pendientes que solventar antes de esa deseada unión.
No sé...son tantas las posibilidades que podría estar escribiendo un buen rato sobre ellas.
Tampoco sé si existe un alma gemela para cada uno,
aveces he pensado :
Y si existe y nos hemos cruzado en la calle sin reconocernos?
Y si estaba sentado a mi lado en el metro y no me enteré?
Y luego digo:
No creoooo...lo reconocería en el acto!!
Me he enamorado más de una vez y en ese momento me ha parecido que era mi alma gemela.
Es una creencia bonita,siempre y cuando no te esclavice a llevar una vida desdichada.
Gea
Imagen:Gustav Klimt