No creo en la concienciación general sino en la individual, y eso pasa por estimular el espíritu crítico como opción personal e intransferible. Querer influir en las personas es el crimen de base sobre el que se asientan todas las manipulaciones que en la historia han sido. Yo prefiero la información a la concienciación, porque pienso que a la gente como a la naturaleza hay que dejarla a sus instintos naturales, ecológicos. Eso es creer en el ser humano y en la naturaleza, lo demás es manipulación. Técnicamente un río muy contaminado se regenera solo si se detiene el vertido de residuos tóxicos. Eso es conocido técnicamente pero nunca experimentado, que yo sepa, porque se ha logrado sanar los ríos a base de depuradoras, no dejándoles en paz. Ya sé que el lado oscuro del ser humano es precisamente ese, manipular, intervenir, modificar el equilibrio del ecosistema.
¿No creen que ya estamos bastante manipulados, sometidos a mentira, hipnotizados? Mi forma de ver las cosas es desvelar, criticar (que viene de la palabra griega “crisos” de la cual deriva el vocablo moderno “Crisis”), poner en cuestión. Y que cada uno saque sus propias consecuencias.